miércoles, 23 de octubre de 2019

Primeros Restaurantes de La Puerta.






                                                                          Oswaldo Manrique R.

Para comienzos del siglo XX, en  la Calle Abajo de la plaza Bolívar, estaba la casa con solar de doña Clemencia González, que fue la primera posada que existió en el pueblo y ocupaba la gente que bajaba tarde del páramo o llegaban de otros sitios, que pudo apenas expender desayunos, con arepas de maíz y harina del norte, cuajada o queso criollo ahumado en el Páramo y guarapo o café. Un sitio de posada para arrieros y gente del Páramo. No existía carretera, las calles eran de tierra, ninguna actividad turística. Un recopilador de los pueblos andinos, señaló acerca de La Puerta, lo siguiente: “…en sus viejos tiempos fue lugar de pernocta y descanso de viajeros y arrieros con sus arreos de mulas...” (Salas Méndez: pág.188). Dicha posada y comedor funcionó durante muchos años como  posada.  Al lado, estaba la Prefectura.    



Fotografía de 1940, se puede observar las esquinas de Manuel Villarreal (izquierda), casa de tapial, de dos frentes y 4 puertas de madera, hoy Bodega de Pablito;  y la del negocio de Pedro Villegas, luego de don Carmen Matheus (derecha), casa con 5 puertas, también de tapial,  que servían como expendios de comestibles para los arrieros. Diagonal a la plaza Bolívar, donde se surtían de comida los arrieros, visitantes y transeúntes, para reponer energías y continuar su viaje.  Cronografía 2513.  


Restaurantes para este tiempo no existían, pero sí, las bodegas y pulperías, que sustituían de una manera particular la necesidad de comestibles de los viajeros. Era normal ver en las esquinas de la plaza Bolívar, a los viajeros sentados comiendo en platos de peltre suministrados por los bodegueros, chaimas y atunes que vendían enlatados, con toda suerte de panes, galletas o arepas de harina de trigo o maíz,  acompañado con queso paramero o de cabra y cuajada criolla, y sus kolas de la época.  En la esquina diagonal a la iglesia, el señor Francisco (Chico) Matheus, nativo de Montecarmelo, junto con su esposa Elda Torres, nacida en el Páramo de La Puerta, creó  una comercial y el Bar Restaurant El Valle, uno de los primeros centros de recreación familiar; dicha edificación la construyó el señor Pepe Lozito.
En la esquina aledaña a la casa parroquial y hasta la avenida Sucre, era propiedad de la señora Cristina Rodríguez de Briceño, por el lado de la Bolívar, se estableció  la Bodega El Campesino; aquí se elaboraban y vendían las populares Roscas de agua dulce.
En la esquina de abajo (avenida Páez), por los años 30, se conoció esta Esquina como del negocio de Pedro Villegas, el viejo, tío de los Villegas (parameños). Luego fue conocida por mucho tiempo como la Esquina de Don Carmen, por establecerse el negocio y casa de Don José del Carmen Matheus. Justo al lado, estaba una casa que servía de posada a los viajeros y a la gente del páramo. Al frente, la Esquina de Pablito, o de los Villarreal, gente del páramo. Aun se sigue llamando así, donde Pablito.   Esta casa la construyó el señor Rafael Villarreal, quien montó un negocio de víveres; el gran muro que le da solidez y marca la esquina, lo construyó el señor Concepción Rivas y sus ayudantes del páramo; antes era, un amarradero de bestias.  

Donde Santana Carrasquero.
Relata el señor Víctor Delgado, el popular “Gordo Víctor”, que uno de los pioneros de las pulperías en La Puerta, fue el señor Santana Carrasquero, adonde acudían los arrieros y viajeros a comprar comestibles, particularmente pan y queso criollo.  Nativo de esta comarca, estuvo casado con la señora Carmen Carrasquero. Vivían frente al Hotel La Puerta, en la avenida Páez. Allí la esposa inició en 1948, la producción de pan criollo, que se hizo famoso y vendía en la pulpería de Santana,  que estaba cerca de la quebrada La Guadalupe (cerca del Hotel Guadalupe), en la misma casa vieja que hoy se observa.  Estuvo hasta el año 1960, en que se fue a El Toldo, en la vía a  Comboco  y puso su negocio en este sitio, donde también aun se conserva la casa de Santana Carrasquero.

Se ha escrito que los restaurantes en el mundo, se iniciaron en París en 1765 y otros que mucho antes en Italia, expendiendo como plato, el caldo de carnes, acompañado de pan  y algunas bebidas. Un dato interesante es que, según la primera tesis, un señor de apellido Boulanger inauguró un lugar de estos, en los que puso un aviso en la entrada, “venid a mi todos los de estomago cansado y yo os lo restaurare”; parece ser que de esta última palabra, se derivaría el nombre de estos locales: restaurant, restaurante o  restorán.  En La Puerta, se iniciaron en 1940. 

El Hotel Guadalupe (1940).
 El primer restaurant de La Puerta, indudablemente fue el del Hotel Guadalupe; cuando comenzó a funcionar  en la década del 40 del siglo pasado, tenía su servicio de cocina y restaurant para sus huéspedes, con variada comida internacional.  El hotel de estilo arquitectónico y características barrocas, abrió sus puertas en 1940,  gracias al financiamiento que en parte hicieron algunas empresas transnacionales, entre ellas las petroleras, cuyos directivos norteamericanos estimaron que La Puerta era un lugar adecuado para que vacacionaran sus empleados. La apertura de este hotel, le cambió las perspectivas económicas a nuestra población, generando empleos directos e indirectos y nuevas actividades. 



Fachada general del Hotel Guadalupe. Fotografía de 1940, tomada de: https://fundaayc.wordpress.com.     


Este establecimiento además de las comodidades de alojamiento y asistencia a los turistas y viajeros, hasta hoy, ha mantenido su restaurant para los huéspedes y visitantes. El año que viene, cumplirá 80 años de haber abierto sus puertas al público, siendo un icono en la actividad hostelera del país. 

Fachada actual y entrada al Hotel Guadalupe, anocheciendo, en su interior está el salón comedor y cocina, que fue el primer restauran formal, con comida a la carta, sirviendo platos nacionales e internacionales, que existió en La Puerta. Se inauguró a principios de los años 40 del siglo pasado. Cronografía propia de este blog. 2018.181.221.

En la década de los 60, alrededor de la plaza, funcionaba un restaurant familiar, hoy conocido como El Valle, diagonal a la esquina de la iglesia, atendido por el amigo contemporáneo Kike Matheus. Esta edificación la construyó el señor Giuseppe Lozito.   También, había un pequeño restaurant en el hotel El Padrino, al lado de la Prefectura.   El Hotel Padrino, es  uno de los más viejos comedores del pueblo, preparaban desayunos, arepas, empanadas y una que otra comida criolla en horas del mediodía. Ubicado en Avenida Páez  entre Calles 7 y  8, abrió sus puertas en los finales de la década de los 60.       


Fachada del Hotel El Padrino, ubicado al lado de la sede de la Prefectura parroquial y Puesto Policial, frente a la plaza Bolívar. Obsérvese esta techado de teja criolla; 4 ventanas en su frente y 1 puerta principal. Se puede ver, en la parte delantera, carros expendedores de comida rápida, que funcionan en la noche. Cronografía 2878.

Hubo igualmente, ventas de empanadas y pastelitos, en casas de familia situadas alrededor de la plaza y en los negocios de las 4 esquinas como donde Miguel Villarreal, Don Carmen Matheus, los Briceño Rodriguez y el de Chico Matheus, que vendían comestibles que los viajeros compraban para consumir de inmediato, acompañados con las recordadas kolas Vidú o el Orange Crush; habían unos viajantes  más avezados que se compraban una lata de chaimas, pedían que se las abrieran y las servían en platos de peltre, con pan y lo acompañaban con una cerveza de las llamadas perritas, de lo más versátil y nutritivas, porque podían ingerir esta comida en la mañana, como almuerzo o en la tarde-noche.


Gráfica de la procesión de San Isidro. Obsérvese al fondo, el local del Restaurant El Valle, de don Chico Matheus y su señora Elda Torres.   Cronografía 2794.

Los más antiguos vecinos, me  relatan  que, la primera casa donde hubo uno de los primeros restaurantes, fue la ubicada en la hoy avenida Sucre, entre los dos Canales, donde una señora de nombre Francisca, que al parecer era oriunda del oriente del país, alquiló esta casa y montó sus mesas, manteles, sillas y gozaba del conocimiento de asuntos gastronómicos y además de buena sazón, preparaban pescados y carnes. Su esposo el señor Francisco Barroeta, la ayudaba a atender el negocio de las bebidas, cuentan que cuando la clientela era buena y gastaba mucho, como tenía varias habitaciones, llamaba a Timotes, y mandaba a buscar a las chicas de los Jardines, para formar la fiesta. Era la casa del señor  Juan Blas Carrizo y la señora Anita Villegas. Cuentan como datos, que la señora Francisca Barroeta, fue la primera mujer que tuvo un carro por puesto, de su propiedad, trabajando en la línea de transporte Valera-La Puerta.
Otro de esos restaurantes primigenios de comida casera, fue el establecido  en la vieja casa que quedaba en la esquina de la avenida Bolívar con calle 4, frente a la esquina de los Palomares. Aquí, por los años 60, estuvo regentando este negocio de comidas, la señora  Rosa. Luego, en este mismo local, refaccionado y rescatando lo colonial andino, a comienzos de los 2000, se conocería “La Tratoria Da Lorenzo”, de los amigos Chelita González y su esposo el “Chamo” Lorenzo (QEPD). 
También se recuerda, la comida del Hotel Europa (luego Pensión Momboy), de la señora Sofía y su esposo Miguel;  se dice que eran oriundos de Alemania u otro país europeo.  El Restaurant del Europa (hoy,Pensión Momboy), propiedad de  estas personas, gozaba de la particularidad que  los turistas extranjeros que se alojaban en el Hotel Guadalupe, cuando llegaban al pueblo buscaban este lugar para comer, por sus finos y elaborados platos propios de la gastronomía europea, preparaban buen cordon blue, el chucrut, rodilla ahumada al horno papas y platos de la comida alemana. 



Fachada de lo que fue el Hotel Europa (posteriormente, Pensión Momboy, estado actual), donde doña Sofía preparaba los mejores platos de la  comida alemana e internacional. Obsérvese con techo de zinc, paredes de tapias, 6 puertas de madera en su frente con avenida Bolívar, y 2 puertas y 4 ventanas de madera, por el lado de la calle 2.  Cronografía 2849.   

La clientela que le iba recuerda que una de las mejores Torta Negra del país se comía en este sitio. Ubicada en la esquina avenida Bolívar con calle 2, frente al Panal y la Terraza Zulia.  Aquí trabajaron Jesús Pacheco y Golfredo Sánchez. Luego, los propietarios, construyeron otro hotel frente al Trapiche, aun se puede observar la vieja casona, y tiempo después, edificaron el   Motel Europa (conocido como las Rusas), en el sector El Cucharito, vía Mendoza-Valera. Al parecer, la novela del extinto escritor trujillano Alizo, Nunca más Lily Martin, está basada en estas personas, sobre la conexión del verdugo nazi Walter Hadamowsky, confinado desde 1942, en la Mesa de Esnujaque.   
En los años 70, fue novedoso el Restaurant y fuente de soda El Panal y la Terraza Zulia, propiedad del señor Benito Sánchez, fue también icono de la gastronomía popular criolla de la región, aquí se podían comer variados platos, carnes y pescados,  especialmente, venia gente de Valera y Trujillo, los domingo o días festivos, a degustar la famosa sopa de arvejas que elaboraba la señora Domitila o las más completas, rellenas y multisapidas arepas andinas.  Ubicado en Avenida Bolívar esquina con Calle 2, abrió sus puertas en los 70, cerró sus puertas hace pocos años.     



A la izquierda y en la esquina, se puede observar parte del local de dos plantas del antiguo restaurant y fuente de soda  El Panal, uno de los lugares más concurridos de la Parroquia.  Cronografía 2848.  


Igualmente, a mediados de los años 70,  ubicado entre las calles 1 y 2, abrió sus puertas el restaurant del Hotel Los Andes, propiedad del señor Giovanni Batista Bianchi Bianchi, oriundo de Firenze, Italia. La especialidad en el tipo de comida que se expendía a los visitantes, era que el mismo señor Batista, tenía sus propias siembras de vegetales y hortalizas que consumían los que gustaban la autentica comida italiana; también servían comida criolla. Cuando Batista llegó en los 60, tuvo el Hotel Miraflores, ubicado en la avenida Bolívar con Calle 5 de La Puerta, mantuvo un pequeño salón comedor para los clientes, igualmente, con buena comida. 


Foto de la fachada del Hotel los Andes (actual), ubicado en avenida Bolívar, entre calles 1 y 2 de La Puerta,  fundado por el señor  Giovanni Batista Bianchi.  Cronografía 2852.  

El Rustico Andino, un establecimiento familiar con pista de baile, se podía comer comidas criollas, más sencillas y carnes, propiedad del señor Jesús Sulbarán (Chuchú). Ubicado frente a la Plaza Bolívar, en la Avenida Páez  con Calle 8, abrió sus puertas en los años 70.       
El Tropical Bar Restaurant, afirmó recientemente el amigo Pedro Méndez, porque es su especialidad  que este restaurant del señor Gil Combita, expendía comida criolla, sopas y uno de los mejores cordon blue de la región, comenta que no tenía nada que envidiarle al que preparaban en el Hotel Guadalupe, y el de los alemanes del Hotel Europa. Seguramente, algo tenía que ver, el hecho que el señor Combita, tuviera justo en el local contiguo una carnicería, otros comentan, que tenia los mejores temas musicales rancheros en su rocola. Ubicado en Avenida Bolívar, entre Calles 3 y 4, abrió sus puertas en los años 60 del siglo XX.       .
El Hotel Chiquinquirá,  ubicado en Avenida Bolívar entre Calles 3 y 4, en las instalaciones de lo que fue en un tiempo, la Escuela de Peritos; abrió sus puertas a finales de la década de los 70. Este hotel con su restaurant, continua expendiendo comida a la carta, con platos para el gusto nacional e internacional, preparan buena comida asiática. Su propietario Nayim Vielma.       
La Zulianita, era un expendio de licores, que llegó a tener venta de comidas criollas; propiedad de la señora Herlinda y de su esposo Jacinto Peñaloza. Ubicado en Avenida  Bolívar entre  Calles 8 y 9, abrió sus puertas en los años 60, y hubo también una gallera. Al frente hubo un restaurante en lo que fue una residencia estudiantil, que regentó la señora Aura, oriunda de Cabimas, sitio alegre, donde se reunía la gente de la música, estuvo Alí Primera, cantando con esta señora y con el recordado amigo Alfonso Sulbarán (El Faraón).
 La Puerta, según la tipología internacional de estos establecimientos de comida, los tuvo todos, hasta hace pocos años. Recordamos de nuestro pasado reciente, que como Restaurante de Alta Cocina (Gourmet) y a la Carta, el Hotel Guadalupe, acondicionado y ambientado como gran salón de comida; que cuenta con amplia cocina,  desde sus inicios en la década de los 40, con su Chef de comida internacional, que escogía los mejores alimentos, y un  especialista en bebidas seleccionadas para la clientela. Así como su Maître y su equipo de mesoneros. En los años 70, incursionó con los Buffet internacionales para atender a grandes grupos de turistas. 


En la esquina izquierda, el restaurant y fuente de soda el Pastelito de Oro, del señor  Gustavo Duque. En este local, funcionó hasta el siglo pasado, la Discoteca La Araña. Cronografía 2847.  

Restaurantes temáticos o por tipo de comidas más populares y de nacionalidades; en comida italiana, el Hotel los Andes, de Batista Bianchi; también la Tratoria de Lorenzo, en la esquina calle 4 con Bolívar; en comida alemana y europea, el Hotel Europa, de doña Sofía; el de comida española y marisquería hubo un restaurant en La Lagunita, propiedad de Luis Alfonso Rivero, que luego lo mudó a la Calle 4 (calle El Trapiche); hubo en los 70, un intento de un local de comida mexicana que duró poco; y de cocina china, en el Hotel Chiquinquirá. De comida criolla, el Tropical, El Padrino,  que se han mantenido,  también el Pastelito de Oro, del vecino Gustavo Duque.
En cuanto a locales feriales y de comida rápida, hamburguesas, perros calientes, cachapas, pizas, dulcerías, heladerías, que  todavía se mantienen los distintos locales del Centro Comercial Valle Verde, al frente del Calvario.  

Foto de la fachada oeste del Centro Comercial Valle Verde, frente con la avenida Bolívar y Calle El Calvario de La Puerta. Cronografía 2941.  

         Al frente de la plaza Bolívar, el histórico Rustico Andino, que poco a poco se fue convirtiendo en un Restaurant-Bar-Discoteca, en el que se podía comer y beber o simplemente consumir alguna bebida alcohólica; es uno de los locales que se ha mantenido. 
 Además de las ventas de comida (restaurantes), que hemos relacionado, hay unos dulces típicos cuya receta es antigua, que solo preparaba la familia de la señora Cristina Rodríguez, que se vendía en la Bodega El Campesino, en la esquina este de la Plaza, son las famosas Roscas de Agua Dulce.
Son roscas peculiares, algo ligeras,  el que las probaba no podía dejar de seguir comiéndolas y compraba los llamados paquetones. La receta según hemos investigado, proviene de la gente de Durí,  Mesa de Esnujaque (familia Molina), y fue transferida a La Puerta,  por la familia de doña Cristina, y luego pasó a sus hijas. Son roscas de harina, huevo, azúcar, mantequilla y manteca de marrano.
Amigos lectores, espero que este articulo les haya gustado. Si posees más información sobre este u otro tema tratado en este blog, agradezco me lo hagas llegar, al igual que fotografías, para mejorar la información a compartir.

 La Puerta, octubre 2019.

sábado, 19 de octubre de 2019

Primer robo en La Puerta.






Oswaldo Manrique R.

Sostenía una amena conversación con la amiga Carmen Pacheco, a propósito de una crónica sobre el inicio del comercio formal a principios del siglo XX, y trajo a colación un suceso que puede considerarse el primero o uno de los primeros hechos delictivos contra el comercio en nuestra parroquia, de esos que en el campo penal se clasifican como delitos contra el patrimonio y a la vez, contra la persona. La importancia de esto estriba en que precisamente la víctima fue el papá de mi interlocutora, el señor Tolentino Pacheco, uno de los primeros tenderos. Me dio datos sobre el atraco, que fueron varias personas las que se le metieron al negocio, uno de ellas lo golpeo y lo encañonaron con sus armas de fuego, el grupo bien organizado, mientras lo tenían sometido, le quitaron el dinero, y fueron sacando bultos de mercancía de mayor valor y la iban montando en una camioneta Ford, parte del grupo se trasladaba en un carro Chevrolet. Mi amiga diligentemente  a los días me prestó el ejemplar del  periódico Diario de Occidente (un poco deteriorado), que había hecho  la cobertura informativa sobre la captura en la población de Pampanito de los autores materiales del robo a Tolentino.
Contextualizando el hecho, ocurrió  el martes 3 de noviembre de 1953. Eran tiempos de la dictadura del general Marcos Pérez Jiménez, en la que la seguridad ciudadana estaba a cargo de un cuerpo policial terrible y sanguinario: la Seguridad Nacional, a sus funcionarios se les decía “Seguranales” y se les acreditaba que eran tan expertos en torturas que hacían hablar hasta a los mudos. Gobernaba en el Palacio de los Duendes, en la ciudad de Trujillo, el señor Atilio Araujo. Existía gran conmoción en el país, por la captura del capitán y líder de la resistencia Wilfrido Omaña, y la  muerte del poeta Antonio Pinto Salinas, ambos fueron víctimas de funcionarios de la Seguridad Nacional dirigidos por el trujillano Braulio Barreto, cada uno con  más de cien disparos de ametralladora, el primero en la Plaza las 3 Gracias de Caracas,   y el segundo en Valle de la Pascua. La capital zuliana, con la que se mantienen estrechos vínculos, desbordaba alegría por la inauguración del Hotel del Lago, el primero con categoría cinco estrellas de la  ciudad de Maracaibo. 


Local donde funcionaba la tienda comercial de Tolentino Pacheco, ubicada en la avenida Bolívar, entre calles 2 y 3, sector La Hoyada, La Puerta, Estado Trujillo, donde ocurrió el primer robo en esta parroquia. 

Según la nota de prensa inserta en el ejemplar del periódico que me facilitaron, se desprende que existía mucha inseguridad en estos pueblos andinos para ejercer el comercio; la ejecución del robo fue realizada por una Banda bien organizada, dotada de armas y con varios vehículos para su movilización personal y de la mercancía robada; sin embargo, la mayoría de los bandidos fueron capturados.
La cobertura periodística la realizó un periódico de la ciudad de Maracaibo, el Diario de Occidente (no existía el Panorama),  que entre su información dio cuenta del gran espectáculo  y el estado de salud  del faquir Igor Rubisnky, quien había sufrido un desmayo por haber sido mordido por una serpiente, con la que llevaba varios días metido en una urna de cristal y era parte de la atractiva función de circo que ofrecía en las inmediaciones del Teatro Baralt; eso ocurrió el  mismo día martes 3 de noviembre, día del atraco a Tolentino. Los maracaiberos, estaban pendientes del faquir, pues había dicho que, no pensaba abandonar el ayuno “es mi deseo y espero cumplir a cabalidad los 30 días de permanencia en esta urna de cristal acostado sobre clavos y junto a las serpientes…” (Diario de Occidente, edición del 05-11-1953. pág. 15. Maracaibo).  El otro suceso, que tomó la atención pública, fue la captura de los bandidos a los que nos hemos referido.


Toma fotográfica del faquir Igor Rubinsky, dentro de la urna de cristal. Diario de Occidente, edición del 05-11-1953. En el texto: Sufrió desmayo el faquir Ribinsky. No obstante esto, anunció que no abandonaría la prueba de ayuno de 30 días. Cronografía 2938. 

Para no agregar ni quitar elemento alguno a este suceso histórico, les transcribo a continuación el texto completo de la nota de prensa.
Titulo: “Nuevos hallazgos en relación con banda de hampones que azotaba a Valera y los pueblos vecinos. Suben a cerca de un millón de bolívares los robos que llevaron a cabo los peligrosos delincuentes en cuestión. Nota”.


Toma fotográfica general de la última página (la 16) del ejemplar de Diario de Occidente, de  la ciudad de Maracaibo, edición del jueves, noviembre 5 de 1953). Arriba en la esquina derecha, se observa la nota de prensa del robo que aquí comentamos. Cronografía 2931.  

 Texto. “Valera. Noviembre (corresponsal Especial). Considerablemente ha aumentado el valor de las mercancías robadas por la pandilla que azotaba distintos estados de la república, llegando actualmente su total alrededor del millón de bolívares.
Conforme informamos anteriormente, esta pandilla fue apresada por la Seguridad nacional de Valera, al ser sorprendidos infraganti algunos de sus componentes, cuando efectuaban un cuantioso robo en Pampanito.
Disponían para sus numerosas fechorías, de un camión Ford grande, un automóvil Chevrolet, una camioneta Chevrolet cerrada y otra de la misma marca y del tipo Pick –Up, todos comprados con el producto de sus cuantiosos robos. Se sabe ya que algunos de los componentes de esa banda fueron los que perpetraron el robo y asesinato de una señora, a la que dieron muerte de un tiro en Pueblo Llano, en el sitio denominado La Horca y a los cuales ya se les está siguiendo juicio por asesinato, mientras los otros se les formará expediente para ser enviados a las Colonias Móviles de El Dorado”.


Gráfica de la nota de prensa, se observan las fotografías de los componente de la Banda que robó el negocio de Tolentino Pacheco, capturados en la población de Pampanito. Cronografía 2937.

Nota al pie de la gráfica: “Componentes de la banda de hampones que mantenían en zozobra a los comerciantes de los pueblos…con sus continuos y valiosos robos. Ellos son Ananías Paredes, Abdón Contreras Carrero, José Lorenzo Ramírez, Pio León Bustamante, Alfredo Ramírez García, Manuel Antonio García, Juan Rojas Vera, Inocente Contreras y Antonio Auamel García”.
“La S.N. ha devuelto ya a distintos comerciantes de esta Plaza, así como de Timotes, Sabana de Mendoza y La Puerta, mercancías por valor de más de cien mil bolívares. El cabecilla de esa importante banda de hampones Melecio Ramírez no ha sido localizado aun, pero la S.N. lo está solicitando activamente, siendo él uno de los que componían la parte de la Banda que cometió el asesinato en La horca, esperándose su pronta detención” (Tomado de Diario de Occidente, de Maracaibo, edición del jueves, noviembre 5 de 1953. Última página).


Otra gráfica de la nota de prensa del corresponsal especial enviado por Diario de Occidente, sobre la cobertura del suceso ocurrido en la Puerta y otros pueblos vecinos. Cronografía 2934. 

De la lectura de esa nota de prensa, se extrae fácilmente que, el próximo mes de noviembre se cumplirán 66 años de este suceso, y podemos concluir, amigos lectores, que éste pudiera considerarse el primer robo ejecutado por una banda de delincuentes, peligrosa y muy bien organizada y equipada,  en la parroquia La Puerta.      
La Puerta, octubre del 2019.

Omanrique761@gmail.com

jueves, 17 de octubre de 2019

Niños de La Puerta, le tocan y cantan a un Santo de carne y hueso (1996).



Oswaldo Manrique R.

Próximo a cumplirse 41 años de que fuera designado como Papa de la Iglesia Católica (16 de octubre de 1978),  y 24 años, que ocurrió su 2ª. Visita Histórica a nuestro país, aquel que llamó a los pueblos a no tener miedo, también conocido como  El Peregrino, bueno es recordar que un pequeño grupo de niños de nuestra comunidad, con su instrumento al hombro, se sumó a una gran orquesta infantil integrada por niños de distintos rincones de Venezuela, fueron a darle la bienvenida a quien con el tiempo seria canonizado y convertido en uno de nuestros Santos contemporáneos.

En 1996, entre el 9 y 11 de febrero, unos pocos niños de  nuestra selección infantil del Núcleo Orquestal “Escuela Adela de Burelli”, de La Puerta, articulando con la experiencia novedosa Orquesta Nacional Infantil de Venezuela, participaron en los Conciertos dedicados a Su Santidad Juan Pablo II, en la ciudad de Caracas.
Estos infantes, recibieron los mejores y más sentidos reconocimientos por parte de las autoridades civiles y militares de la Nación, igualmente, de Monseñor Baltasar Porras (hoy Cardenal), Coordinador de la Visita Papal. Por haber dejado muy en alto el gentilicio trujillano, el gobernador Luis Ernesto González, les otorgó Botón de Oro y una modesta beca.

A las 10 de la noche, del miércoles 7 de febrero de 1996, al frente de la Escuela de Música, subíamos al bus, a esos pioneros orquestales, con su instrumento al hombro,  junto con su morral personal y despedíamos a nuestros niños, que iban rumbo a Caracas. Ellos, alegres, con sus abiertas sonrisas y las madres en la acera del frente, con guardada tristeza por la especial separación.
El día 9 de febrero, un Airbus 320 de la aerolínea LACSA, procedente de la ciudad de Guatemala,   arribó al aeropuerto de Maiquetía. De este avión, bajó el Santo Padre, donde lo esperaban las más altas autoridades del gobierno y de la iglesia nacional. Los entusiastas feligreses desbordaron las calles de la Guaira  y acompañaron a Juan Pablo II en su recorrido hasta Caracas.

La gira del Vicario de Cristo, comprendía 4 países Guatemala, Nicaragua, El Salvador y Venezuela. La visita del Papa a Venezuela, se produjo en medio de un ambiente de mucha convulsión social, tras el llamado Caracazo de 1989 y posteriormente el levantamiento militar del 4 de febrero de 1992. Esto mantuvo al país, en una situación de tensión, desesperanza e incertidumbre, a la par, la inestabilidad política para el gobierno socialcristiano del Presidente Caldera, rebeldes como estaban los cuarteles.
 El Presidente de la República Dr. Rafael Caldera, al darle la bienvenida  el viernes 9, en el aeropuerto, le imploró con voz quebrada consejos para salir de la crisis: "Suplicamos la fuerza de vuestra oración ante el Altísimo y de vuestro mensaje ante los detentadores del poder económico y político",  dijo el primer magistrado. Y añadió con mucha emoción: "Este pueblo está decidido a cruzar definitivamente con voz el umbral de la esperanza" (Tomado Diario El País. Com).  El Papa en respuesta al requerimiento del Presidente, le respondió en oración: "Reina Madre de Coromoto, ilumina a quienes dirigen los destinos de Venezuela para que trabajen por el progreso de todos salvaguardando los valores morales y sociales cristianos" (Ibíd.). De esta manera el Vicario de Cristo, respondió a las suplicas del Dr. Caldera.  

Los niños de esa inmensa orquesta infantil, se lucieron  en sus interpretaciones, incluyendo los nuestros, entre ellos se recuerda a Iván Manrique (cello),  Néstor Rivas (violinista), Karla Villa (violinista), Maritrini,  y otros;   luego de este encuentro musical con el Papa, los llevaron a su alojamiento en el Anauco Hilton unos, y otros al Caracas Hilton. Estuvieron acompañados, por algunos profesores, representantes y el Director Carlos Villa. En su cuido y traslados, estuvieron asistidos por personal de la Marina de Guerra y almorzaban en los comedores de Fuerte Tiuna.


Gráfica de los niños de la Orquesta Infantil de La Puerta, de aquella época, (en la ultima fila vestidos de negro), junto a su director el profesor Carlos Villa, acompañando a los Niños Cantores del Valle del Momboy.

En su encuentro del domingo 11, con los jóvenes, en la avenida Los Próceres de Caracas, el Peregrino, comenzó diciéndoles  <<Vosotros, jóvenes, dais en cierto modo nombre a esta tierra: ¡América, continente de la esperanza!>>, estas palabras,  llenaron de entusiasmo, a las miles de personas que asistieron a dicha avenida. Fue un total frenesí colectivo, lo que allí ocurrió.
Y finalizó su discurso expresándoles: <<A todos vosotros dirijo en particular un llamado a caminar con confianza hacia la nueva primavera de vida cristiana, preparándoos para el Jubileo del Año 2000, que nos introducirá en el Tercer milenio. El futuro del mundo y de la Iglesia pertenece a las jóvenes generaciones que, nacidas en este siglo, serán maduras en el próximo, el primero del nuevo milenio>>. Un mensaje de expectante esperanza. Debemos recordar que estos actos estaban enmarcados en la celebración del Día de la Juventud.
Y como colofón, se despidió con: <<A los niños que me acompañan aquí, expreso un agradecimiento especial. Os beso. Muchas gracias>>.
Ese mismo grupo de niños que viajó a tocarle al Papa, luego integraron la Orquesta de Cámara “Antonio Vivaldi” de La Puerta, fundada   en el año 1998, realizó una destacada gira de conciertos por el país, acompañados de los Niños Cantores del Momboy, bajo la dirección de su institutor el amigo y profesor Carlos Villa. El Papa, pisó tierra venezolana, el 9 de febrero de 1996, al siguiente día, realizaría la Misa frente al Santuario Nacional de la Virgen de Coromoto, en tierras cercanas a Guanare. Karla, al parecer siguió sus estudios musicales, en la capital; Néstor está en el mundo de los negocios, no se ha desprendido de su terruño; Maritrini se fue a Estados Unidos a vivir con la familia; luego regresó a Valera y siguió sus estudios en el NURR. Iván, doble borla universitaria,  en Chile.




El Papa Juan Pablo II, en el Santuario Nacional de la Virgen de Coromoto, en la ciudad de Guanare, estado Portuguesa. A la Misa, asistieron alrededor de 75  mil personas aproximadamente.

Al despedirlo en el aeropuerto, con la actuación de la Orquesta Sinfónica Infantil de Venezuela, me contó mi hijo, que todos, absolutamente todos, se pusieron a llorar cuando el Papa se montó en el avión, cerraron la portezuela y partía a su siguiente destino. Le comenté que esa misma experiencia de hermoso delirio colectivo, la viví yo, cuando lo fui a ver, en su primera visita.


Gráfica del certificado de reconocimiento a uno de los niños de La Puerta, integrante de la Orquesta Sinfónica Nacional Infantil de Venezuela, que asistieron a tocar con su instrumento y a cantar, a Juan Pablo II en 1996. 2770.

Hay que señalar como dato curioso, que todos estos niños, colaboraron con la operación conjunta de las Fuerzas Armadas Nacionales (División de Inteligencia Militar),  que había planificado el alto mando militar de Venezuela, denominada “Nowa Hutta”, en tributo a uno de los logros de este Papa cuando siendo Arzobispo de Cracovia, el Cardenal Wojtyla, se atrevió a desafiar al régimen comunista, y promovió y construyó  un templo monumental en una nueva urbanización, llamada  “Nowa Hutta”, que dentro del proyecto del gobierno, no contemplaba las necesidades religiosas de sus habitantes. El General de División del Ejercito Wilfredo José Guerrero Zerpa, Comandante de la Operación, les extendió certificados de agradecimiento y de reconocimiento.   


Gráfica del certificado de reconocimiento y felicitación a uno de los niños que asistieron a tocar con su instrumento y cantar, a Juan Pablo II en 1996. Obsérvese las rubricas de Monseñor Baltasar Porras, (hoy Cardenal), Presidente de la Comisión Coordinadora de la Visita Papal, y del general de División Ejercito Wilfredo Gutiérrez, Comandante de la Operación Conjunta “Nueva Hutta”, de las Fuerzas Armadas Nacionales. 2768. 

Su nombre secular Karol Józef Wojtyła, nació en Polonia, el 18 de mayo de 1820, murió el 2 de abril del 2005, en la Ciudad del Vaticano.  El Papa Juan Pablo II, fue canonizado el 27 de abril de 2014, por el Papa Francisco, lo que lo convirtió oficialmente en Santo.

Omanrique761@gmail.com

miércoles, 16 de octubre de 2019

¡No!, dijo La Puerta al proyecto ecocida (1980).






Histórica primera plana del Diario de Los Andes, edición  del día martes 22 de julio de 1980, en la parte de abajo, gráfica de la enorme asistencia al cabildo rebelde de La Puerta, realizado el domingo 20 de julio 1980, en el que todas las personas que intervinieron expresaron su rotundo rechazo al desarrollo urbanístico y recreacional de Inturesa. Cronografía 2911.



El pueblo se alzó contra el proyecto ecocida desarrollista urbano (1980).

Oswaldo Manrique R.

 A finales de la década de los 70 del siglo pasado,   avanzando un proyecto desarrollista en nuestra parroquia campesina,  empresarios inmobiliarios, construyeron primero el Centro Comercial Valle Verde, y seguidamente se inició la construcción de los primeros edificios, de lo que se proyectaba  como una ciudad de más de 1.800 casas y edificios, con un coso hípico, teleférico y zona de casino frente al Hotel Guadalupe, que iba a dejar constreñido al pueblo andino de La Puerta, entre dos ciudades de concreto; en respuesta a esto, se fue organizando un pequeño grupo de jóvenes que asumió la iniciativa de  enfrentar el macro proyecto ecocida. Este movimiento de carácter ambientalista, comenzó a coger fuerza en 1979, encabezado por Jorge Luis Abreu, Luis Villarreal, Reinaldo Sulbarán,  Juan José Abreu, Isabel Villarreal, Alfonso Briceño, Benito Rivas, Laura Sulbarán,  Eloy Rivero, entre otros.  La participación fue creciendo, y las reuniones concurridas se realizaban en el Cine Parroquial. Se da este movimiento, en un contexto histórico de post insurgencia, después de la derrota política y militar a la izquierda venezolana, que quedaba en una búsqueda de reconectarse con el país, sindicatos, gremios, movimientos sociales. Venían de la dura división de las FALN-FLN y el asesinato de Fabricio Ojeda y otros comandantes guerrilleros.
Los edificios ubicados frente al Hotel Guadalupe, se comenzaron a construir en 1980, en las propias tierras del Resguardo Indígena, quedantes en el juicio de partición, como zona de ampliación urbana de la comunidad, que fueron irregularmente vendidas a los ecocidas. Coincidía además, con la lucha apoyada e impulsada por la gente del PRV en Cerro Galicia y contra la propuesta del gobierno de Luis Herrera Campins, de construir un puente entre Tierra Firme y la isla de Margarita. Una época en la que la lucha ambientalista tuvo un importante auge y permitió echar las bases de un acumulado de conciencia acerca de la protección y conservación del medio ambiente. A esta de La Puerta, se sumaron izquierdistas como el comandante guerrillero Francisco Prada, Laura Prada, Juancho Barreto, Huma Rosario Tavera, Víctor Álvarez, Alexander Valero, Alí Quintero, Miguel Gutiérrez; moderados como el insigne periodista Guillermo Montilla, el Dr. Basó, el profesor Enrique Araque,  Morelia Valero, Doctor Jelambi, el geógrafo Silvio Abreu, José Hernández, profesora Aura Briceño Monreal, el promotor cultural Alfredo Matheus. De otros lugares, se recuerda al cantante Alí Primera, al dirigente universitario Carracciolo Leon, Presidente de la FCU-ULA, Crisanto Pérez, del movimiento ambientalista FORJA, el Colectivo Simón Bolívar de Trujillo. Hubo una movilización nacional, toma de conciencia, surgió un liderazgo juvenil de la época, y se logró paralizar la construcción  de nuevos edificios.



 Gráfica 2912. Parte de la asistencia al acto de rechazo realizado el 20 de julio de 1980, contra el proyecto ecocida en La Puerta, Estado Trujillo.   

 Un sector  importante de la sociedad venezolana, se hizo solidaria de esa lucha; intelectuales, artistas, músicos, políticos, profesores y estudiantes universitarios, jóvenes de educación media, los no tan jóvenes, se convirtieron en activistas frente al proyecto ecocida, entre ellos destacó la presencia, participación y solidaridad del cantor del pueblo Alí Primera.  Le cantó a esa batalla, a la Madre Tierra y a la naturaleza,  a la resistencia de la población de  La Puerta, canción que se convirtió en un himno de la rebeldía del pueblo.
Junto con Alí Primera, se sumarían cantores como Gloria Martín, Lilia Vera, Los Guaraguaos, el Grupo Ahora, La Chiche Manaure, Jesús "Gordo" Páez,  y un ejército de cultores, quienes convocaron a la movilización popular por la defensa de La Puerta. Dirigentes estudiantiles de la UCV, ULA, UDO y otros centros de estudios secundarios y universitarios, se hicieron presentes.  En esas jornadas, activistas ambientalistas del país,  alzarían también sus voces en defensa de la resistencia anti depredadora urbana, fue una especie de paroxismo lo que estaba ocurriendo en aquellos días en La Puerta. Y se detuvo el proyecto ecocida. 



 Gráfica 2920. Un integrante de la comisión de orden, lee un manifiesto. A la derecha, el hoy ingeniero y profesor universitario Jorge Luis Abreu, dirigente de aquel emotivo y rebelde  movimiento ambientalista.



En la cobertura de prensa que se le hizo a una de las más importantes jornadas de esta lucha ambientalista, debemos rescatar lo que escribió en aquel tiempo el comunicador social Pedro Matheus, que en su percepción de los hechos,  se abría una nueva conciencia, en relación a “los nuevos desarrollos urbanos y  turísticos desbocados, de lucha por el entorno natural y las características sociales de las comunidades andinas nace para la acción de defensa y protección”  (Diario de Los Andes, pág. 18. Edición  del día martes 22 de julio de 1980).


Gráfica 2916. El profesor Enrique Araque, reiterando su condición de luchador conservacionista.

La misma reseña, agrega: “La participación popular comienza a tener una vigencia muy importante. Este acto del domingo en La Puerta  ha trascendido las fronteras del estado Trujillo. el ejemplo, seguro estamos, cundirá por pueblos, ciudades y aldeas de Venezuela, donde la gente se presta a defender cuanto la identifica con las esencias más limpias de la tierra; la historia, los usos, costumbres, la arquitectura de calles y hogares, la flora, la fauna, los espacios libres y hasta una forma de hablar. En ello va la nacionalidad”  (Diario de Los Andes, pág. 18. edición  del día martes 22 de julio de 1980). 


Gráfica 2915. El Dr. Miguel Ángel Burelli Rivas, interviniendo en el acto.


El resumen del reportaje interno.

Texto: en la mañana de ese domingo 20 de julio de 1980 se realizó “la asamblea popular convocada por el Comité de Solidaridad con La Puerta. Luego de escucharse el Himno Nacional tomó la palabra el señor Antonio Torres, Presidente de la Junta Comunal de ese poblado quien hizo un pormenorizado recuento de las luchas libradas a cabo por los campesinos y el pueblo trabajador en la defensa de estas tierras andinas personalidades de la más variadas disciplinas profesionales, ubicación social y pensamiento político se dieron cita en la bella población de La Puerta para expresar al unísono su descontento contra el proyecto de la macro urbanización que se pretendía construir frente al Hotel Guadalupe. Entre los oradores de la asamblea popular mencionaremos al ingeniero agrónomo Pedro José Salinas Jefe del Departamento de Conservación de la Facultad de Ciencias Forestales de la ULA, Ángel Enrique Zambrano directivos de la Federación de Asociación de Comunidades Urbanas, el Dr. Octavio Jelambi, directivo de la Sociedad de Ciencias Naturales, señor Amadeo Rivas, ex presidente de La Puerta, Dr. Gilmer Viloria, Presidente del Comité de Defensa de los Derechos Humanos, bachiller José Hernández, señor Rogelio Torres, Secretario General de la Federación Campesina, profesor Enrique Araque, directivo de la SVCN, concejal Heberto Arandia, sociólogo Alberto Montilla, Reinaldo Sulbarán, presidente del Comité de Solidaridad con La Puerta, Juan José Abreu, Dr. Miguel Ángel Burelli Rivas, personalidades de renombre en la comunidad puertense”.   (Diario de Los Andes, pág. 18. edición  del día martes 22 de julio de 1980).



Gráfica 2917. El Dr. Octavio Jelambi, recordado conservacionista trujillano, ejerciendo el derecho de palabra en el Cabildo rebelde de La Puerta.

Agrega el reportaje, que,  “También participaron los ciudadanos Eustoquio Araujo, Lucila de Farías y Jorge Abreu y muchos más habitantes de La Puerta” (Ídem). Todas las intervenciones rechazaron de plano, que la Municipalidad otorgara el permiso para dicho desarrollo urbanístico, lo que ocasionaría un grave daño a esta población.  


Gráfica 2919. El abogado Gilmer Viloria, interviniendo en el acto de rechazo a los desaforados  desarrollos urbanísticos en La Puerta. Gilmer a comienzos de este nuevo siglo, fue gobernador del Estado Trujillo.

El periodista estimó la asistencia a este cabildo popular, en unas 1.200 personas, con la inasistencia de la mayoría de los ediles, exceptuando a Heberto Arandia, Samuel Rodríguez y Ezequiel Gallardo, que si  estuvieron presentes.  
         En la página 19, el periodista, anotó que “No faltaron los criterios técnicos y científicos que en una forma sencilla explicaron a aquel pueblo trabajador la magnitud del plana empresarial”. Hubo presentaciones musicales y culturales, entre ellas la de Renovación 80 de Trujillo.   


Gráfica 2924. Página 19. Diario de Los Andes, edición  del día martes 22 de julio de 1980.


Una de las intervenciones interesantes y propias de la sabiduría popular, fue la del agricultor  señor Eustoquio Araujo, quien dijo: el gobierno debe velar por la siembra de la agricultura no por la siembra de cemento como se quiere destruyendo la agricultura. Los agricultores de esta zona   queremos que nos dejen trabajar la tierra. La propaganda del Ministerio del Ambiente dice que nadie tiene derecho a destruir nuestro ambiente ni el ambiente de nuestros hijos”.



El Cabildo Abierto vs. el “Cabildo Abrío” y el conflicto desarrollismo urbano vs. ambientalismo campesino.  

En página aparte, encontramos una crónica del citado periodista, publicada en el mismo Diario de los Andes,  que intituló “El triunfo arrollador del pueblo de La Puerta”.  Anotando que “El domingo pasado se quiso aplicar la formula al pueblo trujillano al romper una corriente popular espontanea que perseguía denunciar el atentado contra la naturaleza y el hombre en La Puerta. Pero no fue tan exacto el precepto en esta ocasión: se dividió a la comunidad y aun así el proyecto ecocida fue derrotado”. El Cabildo al que se refiere, fue uno realizado mucho antes del domingo 20 de julio, en el Concejo Municipal en la ciudad de Valera, en el que sin consultar ni dar participación al pueblo víctima, discutió el tema,   y la formula que menciona es “divide y reinaras”.



Gráfica 2922. Explanadas páginas internas 18 y 19,   Diario de Los Andes, edición  del día martes 22 de julio de 1980. Abre en letras pequeñas con: “El Concejo Municipal fue el gran perdedor” abajo en letras grandes, “Con todo éxito se realizó el cabildo verdadero en La Puerta”. Texto de Pedro Matheus.  Fotos Reproducción Montenegro.

En la continuación de la crónica, apuntó: El “cabildo abrío” (como lo bautizo la gente de Valera por lo fraudulento y mañoso) que tuvo lugar en nuestra ciudad contó con un cumulo de intervenciones donde la heterogeneidad en el estilo discursivo no negó la convergencia extraordinaria de todos los sectores en respaldar al pueblo amenazado...de 21 personas que hablaron, 17 estaban en contra del proyecto…a pesar de no haber sido masiva la participación (una buena ruma de solicitudes de intervención se le quedó al Presidente Padilla en mano al cortar abruptamente con su “cabildo abrío…Brillante y valiente fue la oratoria de Carraciolo León, Presidente de la FCU-ULA, fue uno de los pocos que habló sin cortinas verbales, le dio por todo el cañón: “ A este señor Diomedes Barrios vamos a tener que ponerle Diomedes Urbanización por su terquedad en ponerse  al lado de los explotadores y de los empresarios abandonando a los barrios que dice representar”. El Padilla y Barrios, a quienes se refiere, eran concejales de Valera,  que se parcializaron con el reprochado proyecto urbanístico.


Gráfica de la marcha interna por las calles del pueblo, realizada el 20 de julio de 1980; al fondo una pancarta con la leyenda “Para vencer no necesitamos un Concejo manipulado”.  Se refiere a la actitud complaciente de los integrantes del Concejo Municipal de Valera. 2921.

“Las palabras del padre del proyecto –se refiere al DrGarcía Méndez, dueño de la empresa Inturesa-, dejaron mucho que decir pues cuando los espectadores esperaban un lenguaje sobrio y respetuoso  (de quien decía que agitadores de oficio estaban detrás de esta campaña) se encontraron con un manojo de nervios quien se dio a la tarea de ofender groseramente a personalidades de nuestra región”.  En honor a la verdad, y puede ser tema de análisis y discusión, muchos en el pueblo, manifiestan que sí hubo, un padrino gamonal detrás de esto, pescando en río revuelto, que le sacó provecho a este conflicto popular campesino.
  En tributo a esa jornada de lucha ambientalista, Alí Primera estrenaría en 1983, su canción "Abran La Puerta", que se convirtió en un himno de las luchas populares.
         Finalmente, los esfuerzos, logros  y las esperanzas generadas por la lucha ecológica y ambientalista de los 80, lamentablemente se verían frustradas por la complicidad de alcaldes, concejales, funcionarios municipales, regionales y nacionales, ONGs., durante las denominadas  4ª. y  5ª. Repúblicas. Las tierras a las que se había logrado protección, fueron ingresadas al mercado y a la renta inmobiliarias, triunfando los gamonales. Solo quedaría plasmada en música, en una sola canción para el recuerdo. Próximo a cumplirse 4 décadas,  es propicio que se haga una revisión histórica de estas jornadas de luchas populares, que permita una revisión exhaustiva con lo que viene ocurriendo en La Puerta, sobre el ecocidio que ya no respeta nuestras montañas, la inserción inmobiliaria de irregulares capitales, la complicidad de  funcionarios públicos y de gobierno  y la disminución en la calidad de vida en nuestra parroquia. Todos tenemos la palabra.  Mi agradecimiento a Carmen Pacheco, mi vecina, que tuvo la generosidad y la diligencia de localizar el ejemplar de periódico, sobre el que elaboramos este articulo, y por permitirme fotografiarlo. 
 La Puerta, Octubre de 2019.

Omanrique761@gmail.com

De la pugna a cimientos construyendo futuro: El Centro de Educación Inicial "Simoncito" Arturo Uslar Pietri.

Por Oswaldo Manrique (*) Desde la primera asamblea de consulta, los ánimos de los asistentes resultaron alterados. En cada comunidad, en c...