miércoles, 7 de octubre de 2020

El segundo paso de Bolívar por La Puerta (1820).

 


Oswaldo Manrique Ramírez.


<< ¡Qué tontos y qué malvados son todos ellos! Jamás, al contrario, durante todo el curso de mi vida pública he desplegado mas política, mas ardid diplomático, que en aquella importante ocasión; y en esto, puedo decirle sin vanidad, creo que ganaba al general Morillo, así como le había ganado en casi todas sus operaciones militares>> (Bolívar a Perú Lacroix, refiriéndose a la jornada de 1820, en Trujillo).


Bolívar, <<seguido de regimientos escogidos, salió de Cúcuta y en veloz ofensiva, que mucho recuerda la de 1813, se apoderó el 7 de octubre de la ciudad de Trujillo>> (Liévano Aguirre: 14). Esto indica que, venia de Timotes, subió por la Cuesta de la Mucutí, continuó su marcha por el Páramo de las Siete Lagunas, no entró a los que es hoy el área urbana de La Puerta,  siguió hasta bajar por La Mocojó, llegó a la Cañada Mendoza y entró a la residencia de los Labastida, donde fue recibido por la patriota Asunción Vetancourt viuda de Labastida Briceño y por su familia. Había llegado a la Hacienda San Francisco, propiedad del representante de La Puerta, en la Constituyente de 1811, Dr. Francisco Antonio Labastida Briceño y Fernández, quien había muerto en el mismo año 1813, pocos meses después de Bolívar haberse reunido con él, y alojado en esa casa. Este Labastida, era conocido en el foro político como <<El Provincialista>>, hombre ilustrado, doctor en derecho civil, poliglota, fue varias veces teniente de gobernador, a él se debe como líder de los mantuanos, que Trujillo se haya incorporado al movimiento independentista.  

El Libertador Simón Bolívar, en veloz ofensiva en la guerra por la liberación    americana.  

También fue hacendado progresista, propietario de tierras desde la hacienda El Pozo, hasta el Llano de San Pedro, en La Puerta. Bolívar lo apreciaba, le reconocía sus méritos, y lo contaba entre sus amigos fraternos, al igual que a su esposa doña Asunción, quien asumió con pasión la lucha emancipadora. Ambos eran primos del coronel Antonio Nicolás Briceño “El Diablo”, fusilado en 1813 y del líder de los pardos, coronel Francisco Javier Briceño, caído en batalla en la campaña de José Antonio Páez, por los llanos venezolanos.  En dicha casa, además de conversar con su dueña sobre sus propósitos de dirigir de cerca las negociaciones del armisticio entre los representantes imperiales y los republicanos, cenaría y posteriormente pernoctaría, para retomar la marcha al día siguiente.  

Dr. Francisco Antonio Labastida Briceño y Fernández, primer constituyente de La Puerta. Cronografía N° 2819.      


Este mes de Octubre de 2020, precisamente el 6 de este mes y año, se cumplen 200 años, del 2° paso de Bolívar por La Puerta, ya no marchaba aceleradamente movido por la necesidad de llegar triunfante y de primero a la capital de la República, sujeto a la poca tropa y la escasez de recursos; ahora, la situación era otra, la Tercera División realista al mando de Miguel de La Torre, pasó huyendo desde Mérida, inclusive, el Obispo realista y otros clérigos, se fueron en rápido desplazamiento, por el Puerto de Moporo, hacia Maracaibo, bastión imperial. El Libertador, llegaba a Trujillo, a negociar un tratado de armisticio y otro, dedicado a la regularización de la guerra.    

Al ingresar a tierras trujillanas,  por la población de La Puerta, comenzó a observar la lamentable situación de miseria y desolación de esta Provincia andina, que lo impactó intensamente, <<donde la guerra a muerte había tenido sus mas bárbaros desarrollos, el hambre y el empobrecimiento florecían con fecundidad tropical…padres y hermanos, hijos y madres, estaban divididos por terribles odios…la sociedad había regresado a legendarias épocas primitivas>> (Liévano Aguirre: 14); este cuadro económico- social, estaba dispuesto a darle termino.

Casa de la hacienda “San Francisco”, en la Cañada de Mendoza, Parroquia Mendoza, Trujillo, en Venezuela, donde habría pernoctado el general Bolívar, en 1820. Cronografía N° 110809.


En efecto, el 7 de octubre 1820, se había apoderado de Trujillo, había salido de Cúcuta. El profesor Ubaldo García, apasionado estudioso del Libertador, relató en uno de sus audios, lo siguiente: <<muy de mañana, se puso en marcha desde Mendoza población del valle del río Bomboy más arriba de Valera, donde había pernoctado venia, envuelto en el iris de la paz pero dispuesto para la guerra por la liberación americana>>.  A partir de su llegada, se desarrolló con total eficacia, su plan en favor de la regularización de la guerra y por echar las bases para la paz.

Estando en Trujillo, envió nueva carta a Morillo, fechada el 26 de octubre de 1820 y <<Le propone un armisticio por seis meses, que cada ejército ocupe las posiciones que tenga para el momento del Tratado y para facilitar decisiones sugiere una línea divisoria en Maracaibo, Apure, Oriente y Cartagena y sin dejar de mantener abierta la posibilidad de negociar. Morillo recibe esa carta y contesta desde Barquisimeto, casi enseguida, aceptando seguir la negociación>> (Polanco Alcántara, Tomas. Simón Bolívar: Ensayo de una interpretación biográfica a través de sus cartas. Págs. 402 a 412. Biblioteca Digital Andina). Así, su plan estaba en angustiante y  pleno desarrollo.

Los delegados avanzaban en sus deliberaciones. El general y Conde de Cartagena, don Pablo Morillo, aunque se sentía preocupado por los movimientos militares que Bolívar estaba ordenando, no suspendió el viaje de los negociadores, pero en su informe a España estima que esas medidas suponían actos de deslealtad, consideraba que ganando tiempo, podían llegarle refuerzos desde España.

El Libertador, a pesar de todas las vicisitudes que se presentan en una negociación de este calibre y en medio de una confrontación bélica, inclusive, edulcorada con los señalamientos dados por Morillo sobre los movimientos militares del ejército republicano, que suponían "perfidia, odio y mala fe", su preocupación por lograr éxito en esta negociación era de fundamental importancia, para la independencia y para la paz.. Esto absorbe tanto a Bolívar que escribe a Santander, lo siguiente: <<Muchas cosas he dejado de contestar en estos días particularmente porque he estado algo malo y luego porque tengo la cabeza llena de ideas pacíficas y militares que me atormentan noche y día porque debe usted saber que jamás me he ocupado tanto de un negocio como del presente tanto que el día lo paso en pensar y la noche en soñar>> (Carta del general  Bolívar a Santander, Trujillo, 10 de noviembre de 1820). De esa magnitud, era el asunto que se estaba tratando por estos días.  

María Antonia, Adriana y Lorenzana Labastida, las tres damas de alcurnia y nietas de Asunción Vetancourt  y del Dr. Francisco Labastida Briceño, en 1885.  Cronografía N° A0039. 

Luego de las consabidas propuestas y contraofertas, avances y retrocesos de los negociadores, lograron un punto de acuerdo que el Libertador, aceptó y el 25 de noviembre de 1820,  a las diez de la noche,  se firmó el documento por ambas partes. Al día siguiente firmaron el Tratado de regularización de la guerra que, <<según vimos arriba, fue redactado por el mismo Bolívar y presentado por los comisionados republicanos. Los representantes de Morillo sólo variaron en aspectos no principales. Eran muchas las consecuencias que se derivaban de esos dos convenios. Bolívar mandó que las sátiras, dicterios, sarcasmos o críticas contra el gobierno Español o el general Morillo, debían ser suspendidas y toda referencia a ese gobierno y sus jefes "fuese hecha con moderación y decoro". Morillo quiso conocer personalmente a Bolívar y éste accedió>> (Polanco Alcántara: 412), el 27 de noviembre de 1820, se entrevistaron los dos en el pueblo de Santa Ana. 

El presente artículo, tiene el objeto de recordar estos hechos, ocurridos hace doscientos años, con una visión descolonizadora del saber, de forma didáctica y sencilla, sobre base documental cierta, evitando caer en cuentos de camino, o repitiendo errores o invenciones, como aquello de que durmió en casa de un hacendado en la zona urbana de nuestra parroquia y que allí, se le habría dado un banquete, lo cual no es cierto.

La Puerta, Octubre 2020.

 Omanrique761@gmail.com

2 comentarios:

  1. muy buen articulo, ojala y se construyera ese monumento a la paz mundial planteado por Bolívar y Morillo el dia de la entrevista en la población de SANTA ANA.

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  2. Saludos, ingeniero y colega Felipe. Gracias por tu comentario. No desmayemos, sigamos insistiendo en la construcción de ese justo monumento a esa acción heroica civilista, que encauzó un conflicto bélico, con tratados de armisticio y regularización de la guerra, para enrumbarlo hacia la paz. OM.

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